Mobbing laboral: qué es, tipos y cómo prevenirlo desde RRHH

¿Qué es el mobbing laboral o acoso laboral?

El mobbing laboral, también conocido como acoso laboral, es el ejercicio de la violencia psicológica injustificada en el lugar de trabajo.
Se caracteriza por el abuso psicológico sistemático o la humillación de una persona por parte de un individuo o un grupo, con el objetivo de dañar la reputación, honor, dignidad e integridad y, en última instancia, llevar a la víctima a abandonar el trabajo.
El psicólogo sueco Heinz Leymann fue el primero en usar el término inglés “mobbing” para describir el comportamiento hostil de los empleados en el lugar de trabajo en 1970. Leymann define el mobbing como “comunicación hostil y poco ética, dirigida de manera sistemática contra un individuo que, debido al mobbing, es empujado a una posición indefensa y mantenido allí mediante un acoso continuo”.

¿Qué debe hacer el trabajador ante el acoso laboral?

En España, el acoso laboral está prohibido por ley. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece la obligación de las empresas de proteger la salud física y psicológica de sus empleados.
Además, la Ley de Igualdad y la Ley de Protección de Datos también contienen disposiciones para proteger a los empleados del acoso laboral.
En caso de que un empleado sufra acoso laboral, puede presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo o el juzgado de lo social correspondiente.

Ejemplos o señales de sufrir mobbing laboral

Estos son los ejemplos más comunes o señales de sufrir acoso laboral en el trabajo:

• Abuso psicológico
• Acoso moral en el trabajo
• Humillación
• Dicriminación
• Actos de hostigamiento

Diferencias entre mobbing laboral y discriminación laboral

El mobbing se distingue de la discriminación laboral tanto en sus causas como en sus objetivos. La discriminación laboral se basa en un trato desigual hacia un empleado a causa de diferencias físicas o culturales que nada tienen que ver con su desempeño laboral. Por ejemplo, por motivos de género, edad, orientación sexual, ideología política, creencias, etc.

Por otro lado, el acoso laboral no tiene por qué cimentarse en diferencias físicas o culturales, cualquier persona puede convertirse en víctima.

El objetivo de la discriminación laboral es que el afectado tenga unas condiciones de trabajo peores que el resto de empleados (sueldos, jornada laboral, descansos, etc.), por el simple hecho de ser “diferente”.

En cambio, el objetivo principal del mobbing laboral es el hostigamiento de un trabajador con el objetivo de degradar su clima laboral, obligándole a aceptar condiciones laborales injustas o incluso a abandonar su puesto de trabajo.

Sin embargo, no todos los casos del mobbing laboral son iguales. El acoso laboral puede manifestarse de muchas formas y por diversas razones, como veremos a continuación.

Tipos de mobbing laboral

Comprender los diferentes tipos de acoso es fundamental para elaborar estrategias de prevención y reconocer los síntomas en las víctimas. Según la relación jerárquica entre la víctima y el agresor o agresores, podemos identificar los siguientes tipos:

1. Mobbing horizontal
2. Mobbing vertical
3. Mobbing estratégico
4. Mobbing de dirección
5. Mobbing perverso
6. Mobbing discriminatorio
7. Mobbing disciplinario

Mobbing horizontal

El acosador y la víctima se encuentran en la misma categoría profesional o nivel jerárquico. Es decir, es un tipo de mobbing laboral que se da entre compañeros de trabajo, incluso dentro del mismo departamento. Las causas que lo provocan pueden ser muy variadas: una personalidad dominante del acosador, enemistades personales entre trabajadores, forzar al más débil a realizar las tareas más desagradables o pesadas o incluso el aburrimiento por falta de trabajo..

Mobbing vertical

En este caso, el acosador se encuentra en una categoría profesional o nivel jerárquico superior o inferior al de la víctima. En función de ello, se puede distinguir entre mobbing ascendente o descendente.

El mobbing laboral ascendente se produce cuando uno o varios subordinados atacan o acosan a un superior. No suele ser frecuente ya que prevalece el miedo o temor a que el superior pueda tomar represalias.

Por su parte, el mobbing descendente es mucho más común que el anterior. Se da cuando un superior hace uso de su situación de poder para acosar a un subordinado. Este tipo de acoso también se conoce como bossing.

Mobbing estratégico

Es un tipo de mobbing vertical descendente que se aplica de una forma institucional. Es decir, el acosador utiliza su posición de superioridad para hostigar a un trabajador, buscando que el acosado renuncie a su puesto de trabajo.

Al ser el trabajador quien abandona la empresa de forma voluntaria, la empresa no tendría que pagarle la indemnización por despido.

Mobbing de dirección

Otro tipo de mobbing laboral descendente, ejecutado por la dirección de la empresa. Se emplean amenazas de despido para fomentar el miedo y aumentar la productividad.
También se utiliza con la intención de prescindir de trabajadores poco receptivos o sumisos, o de aquellos que no se ajustan a las expectativas o necesidades de la cúpula directiva.

Mobbing perverso

Este tipo de mobbing no tiene ninguna razón ni objetivo definido. Se basa simplemente en la personalidad perversa o manipulativa del acosador. Esta clase de mobbing laboral es una de las más perjudiciales para la empresa, y también una de las más difíciles de erradicar. No se puede subsanar estableciendo otras dinámicas o flujos de trabajo. La única solución es la reeducación del acosador (lo cual es complicado) o su despido.

Mobbing discriminatorio

En este caso, el mobbing laboral sí se asemejaría a la discriminación en el trabajo, ya que este tipo de acoso se fundamenta en razones de índole cultural o física. Es decir, se realiza mobbing a un empleado por el simple hecho de ser diferente. Puede ser acoso por razones de edad, sexo, apariencia física, enfermedad, creencias religiosas, ideología política, condición sexual, entre otros.

Mobbing disciplinario

Es un tipo de mobbing laboral que emplea las amenazas para que los empleados actúen de manera sumisa y no cuestionen las decisiones y acciones llevadas a cabo por la dirección de la empresa. El objetivo es infundir temor y miedo a las víctimas, además de advertir al resto de compañeros lo que puede pasar si actúan de la misma manera.
Este tipo de mobbing es habitual contra empleados que reclaman mejores condiciones laborales, solicitan bajas o denuncian prácticas ilícitas de la organización.

¿Cómo prevenir el acoso laboral desde RRHH?

Desde RRHH, hay varias medidas que se pueden tomar para prevenir el acoso laboral en la empresa. Algunas de ellas incluyen:

• Fomentar una cultura empresarial que promueva el respeto y la empatía entre los empleados.
• Ofrecer formación y sensibilización sobre el acoso laboral a todos los empleados de la empresa.
• Implementar políticas y procedimientos para reportar el acoso laboral de manera confidencial.
• Investigar todas las denuncias de acoso laboral y tomar medidas disciplinarias si se demuestra que ha habido conductas inapropiadas.
• Establecer unas normas de conducta internas claras, con un código ético basado en el respeto a los demás.
• Ofrecer un canal de comunicación efectivo para que las víctimas de mobbing laboral puedan hablar con un departamento especializado que aborde su problema, garantizando el anonimato siempre que la víctima así lo desee.
• Realizar acciones formativas y de concienciación con los empleados de la empresa.
• Fomentar el compañerismo y el trabajo en grupo, eliminando puntos negros como la ambición desmedida.
• Distribuir tareas en base a las capacidades o méritos de los empleados, huyendo de favoritismos.
• Modificar, de común acuerdo con el trabajador, las tareas o actividades a desarrollar, con el objetivo de no caer en la monotonía.
• Promover un entorno donde haya espacio para las nuevas oportunidades y el crecimiento personal.
• Velar por el mantenimiento de un clima agradable para todos, evitando la presencia de “ovejas negras” o actitudes negativas.
• Organizar actividades fuera de la oficina que ayuden a establecer relaciones más cercanas entre los empleados (reuniones, cenas, entre otros).
• Ser justo en los procesos de selección, otorgando los puestos de trabajo de acuerdo a la valía del profesional.
• Evaluar de forma justa a los candidatos en las promociones internas, para evitar posibles conflictos.

Conclusión

Un lugar de trabajo saludable, positivo y libre de acoso elimina la toxicidad y fomenta el compromiso de los empleados y al aumento de la productividad. Por lo tanto, debes asegurarte de que tu lugar de trabajo no tolere el acoso laboral ni la discriminación hacia nadie.

Esperamos que este artículo te haya sido útil para comprender y reconocer el mobbing o acoso laboral. ¡Cuéntanos tu opinión en la sección de comentarios a continuación!

Este artículo está escrito por Paritripti que es traductora de español y escritora de contenido en Vantage Circle. Ella es apasionada sobre la lengua española y el espíritu empresarial y quiere viajar por el mundo. Para ponerse en contacto editor@vantagecircle.com